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El pasado 17 de marzo de
2004 el Real Zaragoza añadió a sus vistrinas su sexta Copa del Rey tras
derrotar al Real Madrid por 2-3. El equipo aragonés ganó con merecimiento tras
una noche repleta de tensión, emoción e incertidumbre y tras un partido enorme.
El Real Zaragoza puso alma en cada acción mientras los blancos fueron cediendo
a la evidencia. Ambos equipos se quedaron con 10 hombres tras las expulsiones de
Cani y de Guti. El argentino fue el héroe del equipo de Víctor Muñoz al marcar
el gol de la victoria poco antes de finalizar la prórroga.
A continuación podéis vivir
de nuevo la retransmisión que realizamos en Cope Zaragoza Juan Luis Irazusta, Luis
Gómez Fajardo, Eduardo González y un servidor, que con orgullo realizó la tarea
de inalámbrico y de retransmisión del encuentro. Para mi fue inolvidable.
A continuación os dejo la primera
parte del partido. El Real Madrid
comenzó dominando y tuvo más posesión que el Real Zaragoza. Guti, con una
vaselina en el minuto 12, creó la primera ocasión clara para los blancos,
aunque Laínez adivinó sus intenciones y, con una soberbia intervención, envió
el balón a saque de esquina. El equipo de Queiroz, que jugó como local, empezó
a arrollar a su rival con el paso de los minutos, hasta que llegó el primer
gol. Beckham, en el minuto 23, ejecutó magistralmente un
lanzamiento de falta directa que hizo inútil la estirada de Laínez. El Madrid
empezó a sonreír. Pero el Real Zaragoza despertó de su letargo y, sólo
cinco minutos después, Dani aprovechó una gran jugada de Savio para batir cómodamente a
César. Los aragoneses le dieron la vuelta a un encuentro que parecía estar servido
en bandeja para los galácticos, que
trataron de imprimir más mordiente en ataque. Mientras, Beckham tuvo sus más y
sus menos con Alvaro tras sufrir una dura entrada. Milito, el jugador que no
quisieron fichar Pérez y Jorge Valdano el verano anterior a la final, también
se mostró duro en defensa. Figo lo intentó con caracoleos en la frontal del
área, pero se adornó en exceso y terminó perdiendo el balón en muchas ocasiones.
Con los blancos dominando y a escasos segundos para el final, llegó el segundo
gol del Real Zaragoza. David Villa se inventó una jugada y, con César superado,
llevó a Guti a cometer penalti sobre el asturiano. El propio Villa se
encargó de transformar la pena máxima. Ya no hubo tiempo para más, y la segunda
parte dilucidaría las cosas.
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